El Gran Canciller, el Consejo Fundacional, las Autoridades Rectorales, Decanales y toda la Comunidad Universitaria, lamentan profundamente el fallecimiento del
30º Prepósito General de la Compañía de Jesús
Hecho acaecido el día de hoy, en la ciudad de Tokio, Japón. En estos momentos de dolor por la pérdida física, pero con el agradecimiento por una vida de servicio a la misión, hacemos llegar al R.P. Arturo Sosa Abascal, S.I. Prepósito General, al R.P. Rafael Garrido S.I. Prepósito Provincial de Venezuela y en ellos a todos los miembros de la Compañía de Jesús, nuestras oraciones y palabras de cercanía fraterna, con la esperanza puesta en Dios que ya ha recibido en Su seno al Padre Nicolás.
Nota Biográfica:
Adolfo Nicolás Pachón nació en Villamuriel de Cerrato (Palencia), España, el día 29 de abril de 1936, en el seno de una familia de militares, pero con profundas raíces religiosas. Su infancia y adolescencia transcurren entre su lar nativo, Barcelona y Madrid. Ingresa como novicio en Aranjuez, licenciándose en Filosofía en Madrid y en Teología en Tokio, ordenándose en esta última ciudad como sacerdote. Doctor en Teología por la Universidad Gregoriana en Roma. Profesor de Teología y Director del Instituto Pastoral de Manila, fue también Provincial en Japón, atendiendo pastoralmente a pobres y migrantes, ejerciendo también otras funciones en el gobierno de la Compañía. En enero de 2008 es elegido el XXX Prepósito General de la Compañía de Jesús, en sustitución del R. P. Peter Hans Kolvenbach, S.I., durante su Generalato el compromiso social, el apostolado intelectual y el diálogo con todas las realidades, ad intra y ad extra de la Iglesia, le resultaron distintivos. En 2016, luego de ocho años de fructífera labor, entrega el Generalato al R.P. Arturo Sosa, S.I., antiguo Rector de esta casa, regresando el P. Nicolás al Oriente, para servir en Manila y retornar luego a Japón. Hoy, 20 de mayo de 2020, ha sido llamado a la Casa del Padre.
Como dijo de él, el Padre Edgar Magallanes, S.I. miembro de nuestra comunidad ucatense, era: “Una persona muy bondadosa, sencilla y con buen sentido del humor. Llamó en su generalato a la profundidad y a superar la distracción para un mayor servicio ¡Entra a la presencia de Dios!”
Una oración compuesta por el Padre Adolfo Nicolás, S.I., para meditar y compartir:
Señor Jesús,
¿Qué flaquezas has visto en nosotros que te han decidido a llamarnos, a pesar de todo, a colaborar en tu misión?
Te damos gracias por habernos llamado, y te rogamos no olvides tu promesa de estar con nosotros hasta el fin de los tiempos.
Con frecuencia nos invade el sentimiento de haber trabajado en vano toda la noche, olvidando quizá que tú estás con nosotros.
Te pedimos que te hagas presente en nuestras vidas y en nuestro trabajo, hoy, mañana y en el futuro que aún está por llegar.
Llena con tu amor estas vidas nuestras, que ponemos a tu servicio.
Quita de nuestros corazones el egoísmo de pensar en ‘lo nuestro’, en ‘lo mío’, siempre excluyente y carente de compasión y de alegría.
Ilumina nuestras mentes y nuestros corazones, y no olvides hacernos sonreír cuando las cosas no marchan como querríamos.
Haz que al final del día, de cada uno de nuestros días, nos sintamos más unidos a Ti, y que podamos percibir y descubrir a nuestro alrededor más alegría y mayor esperanza.
Te pedimos todo esto desde nuestra realidad. Somos hombres débiles y pecadores, pero somos tus amigos.
Amén.
San Cristóbal, a los 20 días del mes de mayo del año 2020.