La Universidad Católica del Táchira, consciente de las grandes dificultades que actualmente vive el pueblo venezolano y particularmente nuestro Estado Táchira, reitera una vez más el compromiso con la sociedad y la familia tachirense en el cumplimiento y finalización, por parte de sus estudiantes, del presente año académico.
En tal sentido la Universidad, a través de las instancias competentes adopta, como ha sido su consecuente modo de proceder, todas las medidas que resulten necesarias, adecuadas y convenientes para tal fin, atendiendo a la diversidad exigida por cada facultad, turno, carrera y año, como concreción del Bien Común. La flexibilidad que permite la normativa rectora de la vida institucional, aplicada por las señaladas instancias, es un medio para crear y sostener escenarios con este propósito.
La UCAT tiene la responsabilidad de cumplir con su misión, por lo que de cara a Dios nuestro Padre, no se resigna a permanecer de brazos cruzados y las aulas cerradas. Mantener la institución abierta y funcionando, mediante la colaboración eficaz de todos los integrantes de la comunidad ucatense, se constituye en medio para evitar que se siga arrebatando la cotidianidad y se pierdan espacios desde los que se actúa para el mejoramiento personal, de la región y el país. La Universidad, dentro de sus posibilidades, no puede permitir que la situación del país, cause un daño más grave en perjuicio de sus estudiantes.
Solo la actuación sensata, responsable y comprometida, en cumplimiento de los objetivos trazados como comunidad en la búsqueda permanente de la verdad, permitirá a todos los ucatenses contribuir de manera efectiva en la consecución del bien mayor de alcanzar una vida digna y justa, como la merece y requiere el pueblo venezolano.
Adoptada en el Salón de Sesiones del Consejo Universitario, a los 28 días del mayo de 2019.