Los voluntarios de Doctor Yaso buscan alternativas para seguir realizando labor humanitaria
Formación, reflexión y acción
La prevención y los cuidados que se han tenido que acatar ante la pandemia por la covid-19 han obligado a replantear las prácticas humanas en casi todas las áreas, especialmente en el área de la salud. Es el caso de muchas organizaciones de tipo humanitaria (ONG, voluntariados) que tuvieron que interrumpir su labor, por el propio cuidado de sus miembros y el de sus beneficiados desde principios del año 2020.
Tal es el caso de Doctor Yaso, payasos humanitarios, que una vez decretada la cuarentena, tuvo que suspender todas las actividades presenciales a nivel nacional e internacional. Durante esos meses el voluntariado adoptó la modalidad de “visitas virtuales” como un modo de seguir ofreciendo el servicio a la comunidad, a la par de realizar reuniones y jornadas de formación virtual.
La virtualidad permitió seguir en contacto con los voluntarios y los beneficiados de manera segura.
Fue hasta finales del año 2020 cuando la coordinación del programa Doctor Yaso consideró que se podía asumir el reto de realizar visitas con el voluntariado de payasos humanitarios de manera presencial, esta vez con nuevos detalles para tener en cuenta, enfocados en la bioseguridad antes, durante y después de la práctica, pero también centrados en aportar un beneficio concreto para quienes más lo necesitan a la vez de sensibilizar y brindar información sobre la prevención de la covid-19.
En esa oportunidad, las actividades se retomaron en noviembre del año 2020 visitando las comunidades de Zorca y Rubio, tras las inundaciones producto de las lluvias.
No es fácil, pero es necesario ¡Si se puede!
El tiempo sigue avanzando, las personas y los proyectos van encontrando el modo de adaptarse para poder continuar. En este sentido se hace imprescindible generar confianza en medio de un contexto en el que no se puede bajar la guardia ante la pandemia del coronavirus.
Para el equipo de Doctor Yaso la prioridad siempre ha sido: cuidar y brindar el mayor beneficio posible a los pacientes, a la vez de cuidar y acompañar a los voluntarios. Bajo estos principios se han realizado los ajustes necesarios para seguir realizando la labor, en un formato más reducido, con estrictos protocolos de logística y coordinación y acatando las normas de bioseguridad con respeto y consciencia.
Para llegar a ese punto, la coordinación general de Doctor Yaso ha realizado reuniones presenciales y virtuales con los voluntarios para dialogar sobre la situación y visualizar tanto las acciones como el modo de realizarlas. También han tenido asesorías con especialistas del área de la salud y con las instituciones donde prestan servicio.
Adicionalmente, han hecho un énfasis en retomar dinámicas de formación, primeramente para incorporar y ejercitar las nuevas normas de bioseguridad por parte de los voluntarios, pero también para ellos pudieran reconectar con su payaso a través de la mística del juego y la exploración.
En ese sentido, los payasos humanitarios tienen la particularidad de realizar un servicio que requiere entrenamiento físico, mental, emocional e incluso espiritual. Ellos deben poder manejar su propia energía y creatividad como un elemento vivo que está en una constante relación dinámica con los lugares, personas y contextos.
Por eso, antes de volver a las actividades presenciales, se han realizado jornadas de formación para pequeños grupos, lo que ha impactado directamente en el aumento de la confianza, la motivación, el ánimo y la disposición de los voluntarios para volver a llevar sus payasos a donde sea necesario.
Entre las últimas actividades que ha realizado el programa Doctor Yaso, se destacan:
1) Jornada médica en Naranjales, Municipio Fernández Feo, Estado Táchira, en apoyo al I CUMIS (Campamento Universitario Multidisciplinario de Investigación y Servicio de ACUEM ULA Táchira) (14 de mayo de 2021). Esta jornada contó con un equipo de 35 personas del CUMIS, acompañados por 30 médicos voluntarios. Se logró llevar atención médica a más de 500 personas de la comunidad en las áreas de pediatría, medicina interna, cardiología, ginecología, medicina general, traumatología, urología, odontología y psicología. Con una planificación de más de 4 meses, se contó con el apoyo de ACNUR Venezuela, UNFPA Venezuela, la Sociedad Wills Wilde y UNIANDES A.C. Por parte de Doctor Yaso asistieron 7 voluntarios.
2) Visita en el Hospital General de Táriba (21 de mayo de 2021) Esta representa la primera visita en un centro de salud realizada desde marzo del año 2020, cuando inició la pandemia. Se logró gracias a un proceso de diálogo con la directiva del hospital para determinar las condiciones y protocolos de seguridad en el lugar. En esta oportunidad se atendieron los servicios pediatría, traumatología, medicina interna, cirugía e inmunización. En total se visitaron 77 personas (27 pacientes, 34 acompañantes y 16 personas entre médicos, enfermeros, camilleros y personal administrativo y de mantenimiento). Por Doctor Yaso asistieron 10 voluntarios.
3) Visita en el Hospital Militar (29 de mayo de 2021) Gracias a una solicitud de la institución y a la apertura de sus directivos, el programa Doctor Yaso visitó este centro de salud. Se atendieron 63 personas, en áreas pediatría, trauma y áreas comunes. Asistieron 3 voluntarios de Doctor Yaso.
4) Visita en alianza con Santa en las Calles para Fundación Guardianes del Futuro 2020 en San Rafael de Cordero (04 de junio de 2021) Se atendieron a 25 niños, en una jornada de compartir y de llevar insumos. Participaron 5 voluntarios de Doctor Yaso payasos humanitarios.
Aunque la labor de muchas organizaciones humanitarias haya tenido que mermar por la pandemia, no queda duda que la voluntad y la disposición de servicio de las personas que se dedican a este tipo de iniciativas sigue latente y orientada a la acción, como es el caso de Docto Yaso, payasos humanitarios sede San Cristóbal, coordinado desde la Universidad Católica del Táchira, que continúa haciendo posible la atención humanitaria y solidaria a quienes más lo necesitan.
San Cristóbal, 24 de junio del 2021.
Coordinación de Arte y Cultura
Decanato del Medio Universitario
Universidad Católica del Táchira